A la hora de adquirir llantas para nuestro vehículo, el mercado es muy amplio. Muchos fabricantes ofrecen sus productos nuevos, a precios diferentes. Si nos decantamos por el mercado de ocasión, también son muy variadas las ofertas que encontraremos. Sin embargo, con las llantas segunda mano, hay que tener unas precauciones básicas para una garantía de seguridad y durabilidad mínimas.
¿Quién te vende las llantas de ocasión?
Tienes que analizar muchos detalles y tener claro lo que vas a montar en tu vehículo. Una de las cuestiones importantes hace referencia a si la llanta tiene desperfectos y si ha pasado por algún tipo de reparación por parte de profesionales que garantice su buen estado y por tanto su uso. Nosotros no recomendamos comprar llantas de segunda mano a particulares ni a desguaces porque por lo general, este tipo de llantas si han sufrido algún golpe y están dañadas, puede que a simple vista no se aprecien por lo que posteriormente a su instalación, pueden aparecer los graves problemas.
Recomendaciones en la adquisición de llantas de segunda mano
- Contar con referencias. Lo más aconsejable es acudir a un experto en llantas como Selcus que cuente con el suficiente equipo técnico y herramientas que puedan certificar que las llantas de ocasión están en perfectas condiciones y listas para darles una segunda oportunidad sin que esto acarree problemas de seguridad.
- Evaluar la marca. La marca indica mucho sobre la calidad y la garantía. Las casas productoras más conocidas, poseen estrictos procedimientos de calidad de sus productos. A pesar de que la llanta sea de segunda mano, una marca conocida puede dar referencias de su estado.
- Algunas marcas ofrecen un precio muy atractivo, pero a medio plazo pueden surgir muchas complicaciones. Entre ellas, las llantas de imitación de baja calidad tienen mayor probabilidad de que se doblen, se originen vibraciones en la conducción, incluso averías en el rodamiento y en la transmisión. Si no se eligen marcas conocidas como BBS, OZ Racing o Mak, siempre es aconsejable que, al menos, se trate de marcas originales.
- Asegurarse en la medida de lo posible de que sean el mismo tipo. Lo principal antes de adquirir una llanta, es asegurarse de que son iguales a las que están en uso. Sobre todo, en el caso en el que no se sustituya el juego completo. Una llanta sola diferente al resto, puede causar desperfectos en el vehículo. Es recomendable revisar las indicaciones antes de comprar. Pero aún así, las llantas compatibles también son adecuadas y una alternativa a las originales puesto que existen diferentes marcas y diferentes medidas de llantas que pueden adaptarse a la mayoría de los vehículos.
- Las medidas. No existen medidas estandarizadas para todos los coches. Cada marca, e incluso cada modelo, puede contener unas medidas de anchura, de buje y de ET diferentes. Es importante asegurarnos bien de las medidas antes de la compra.
Y como comentábamos, las llantas que compremos, por supuesto que no tienen que tener desperfectos, aunque sean de segunda mano. No deberán estar dobladas y no tendrán abolladuras o golpes. Un buen truco para evaluar su estado es poner las llantas de pie y mirarlas desde arriba hacia abajo. Si han sido reparadas, lo sabremos porque tendrán soldaduras. También puede darse el caso de que tengan demasiados puntos de soldadura, y en este supuesto, no es aconsejable su adquisición porque pueden estar descompensadas. Por tanto, el estado general de las llantas de aluminio debe ser bien revisado.
¿Cuántas llantas deben sustituirse?
Dependerá en función de si es un objetivo meramente estético o porque la llanta necesita ser cambiada por motivos de funcionalidad. En el caso estético no habría inconveniente en cambiarlas de una en una, es decir, pueden cambiarse únicamente una o dos, no es necesario cambiar las cuatro al mismo tiempo. Si es un tema funcional, entonces habría que cambiar las llantas que estén dañadas, lógicamente. En cualquier caso, podéis contactarnos sin compromiso y contarnos vuestro proyecto que estaremos más que encantados en poder ayudaros.